El Castillo Yoros es el único castillo bizantino que permanece en Estambul. Los equipos han estado trabajando en la excavación del complejo, donde todavía existen las ruinas de la ciudadela y murallas que la rodeaban, pero otras estructuras como la mezquita y la mayoría de las torres han desaparecido. El castillo defendía la entrada del Bósforo y funcionó como un cuartel militar de la época otomana. Los visitantes no pueden entrar en el castillo, debido a los trabajos de excavación, pero se pueden hacer solicitudes para poder verlo.