Quimera, también conocida como Burning Rock es un grupo de llamas que arden espontáneamente de las grietas, en las laderas rocosas del Monte Olimpo. Según la mitología Zeus estableció Chimera (hijo de la diosa de la tierra Gaia) en el fuego y lo enterró vivo bajo el Monte Etna, creando así el volcán. El gas todavía se filtra de la tierra y estalla en llamas al contacto con el aire. Una vista impresionante y sin duda una visita obligada en Turquía.A unos 250 metros sobre el nivel del mar, la caminata hasta llegar a las llamas puede ser bastante larga y es mejor hacerla hacia la noche, para que resulte aun más interesante la vista a las llamas azules. Hay algunas ruinas cerca de las llamas, que en su mayoría datan de la época bizantina y un templo pagano dedicado a Hefesto.